jueves, 3 de diciembre de 2009

El artista y su musa

Comenzando con lo más extraño de éste asunto:
Ni tan siquiera puedo atreverme a tocarte,
pienso que si lo hago una parte de ti se manchará,
así que prefiero tenerte a un lado, mi pequeña estatua,
luciéndote para mí en el estado más bello y puro.
Ya no te hablo por miedo a que te enfades
y salgas dando un portazo para no volver jamás.
Sé que serías capaz de hacerlo ¡Te muestras tan segura!

Siento una admiración eternamente enfermiza por tu persona;
Te plasmo en mis creaciones, en mis actos y en mis gestos.
Sonríes sin mirarme como si me hicieras alguna clase de favor.
Bien, te explico el juego: Yo me desvivo por complacerte
si permaneces a mi lado, si te quedas aquí y no me abandonas.
Ah, pero no dejo de pensar en éste nuestro ambiente tenso
¿Te interesan mis creaciones? ¿Hay en ti alguna clase de amor?
Te preguntaría mil cosas, pero tengo miedo a perderte.

Sabes que te he estado siguiendo y levantas tu preciosa mano
para pararme en seco. Sí, aquí se separan nuestros caminos;
Tú con tus curvas fatales y tu decadencia semi perfecta
y yo contemplándote tembloroso con los ojos como dos platos.
Entonces te muestras sensual yendo a tu propio Olimpo.
Allí no hay sitio para alguien como yo, allí ya no me esperas.

Con tu dios al que describes como si fuera imperfecto,
tus drogas, tus joyas y el resto de cosas ajenas a mí
y la nube de azufre que se está elevando a través de mi esófago
recordándome que debería tener un poquito más de orgullo,
pero ¿Qué puedo hacer yo contra tu ambiente selecto?
Voy manchado de pintura y desprendo olor a barniz,
sobreviviendo día a día porque por unos instante estás a mi lado,
me perteneces sólo a mí y no formas parte de ése barullo.

Vuelvo a casa, mi pobre casa, recordando tu sonrisa,
se repite una y otra vez en espiral ¡No puedo olvidarla!
Es esa canción perfecta que creí haber escuchado una vez.
Eres muy fría, pero tu ternura fingida crea adicción,
jugueteando con tu mirada, cotilleando en mi cocina,
tu sonrisa triste y desgastada ¡No puedo negarte nada,
me observas y yo pienso que me podrás llegar a querer!

Arcángel

Ya no quieres decir nada malo, arcángel caído
ya ni siquiera me importa quien o qué te creó
o el motivo de porqué ya no significas lo mismo.
Aquí no hay sitio para nadie, ni para tu dios,
ése mismo que estuvo cerca, contigo y conmigo
¡Oh! Para más tarde abandonarnos a los dos
tras de absorber lo mejor de nosotros un poquito.
Después de eso puede decirse que nos va mejor,
no existe la pena, el llanto, no tenemos castigo.
Es más, recompongo tus alas negras en el salón,
para que jamás nos puedan arrancar del exilio.

jueves, 29 de octubre de 2009

29-oct-09

Ya no debo coserme la boca y cortarme las manos;
Poco a poco vuestro círculo negro se va cerrando,
sopeso las posibilidades una tras otra
y veo que en realidad nada me importa;
Caras que ya ni si quiera están en mi mente,
caras que se han borrado, manchas de aceite.

Tú y tu perro, juntos, uno al lado del otro
como una misma pupila dentro de un ojo,
imagen que con un puñetazo se haría añicos,
ninguno de nosotros pertenece a ningún sitio,
éste mundo lleno de cieno apestoso y verde,
sí, tendríais que pagar para llegar a verme.

Alzo la cabeza con un orgullo que hacía tiempo no conocía,
estoy caminando muy fuerte, no me tiemblan las rodillas.
Sonrío para mis adentros, todo parece ir demasiado bien,
no me quejo, ni me avergüenzo de lo que soy o debería ser,
sólo escucho silencio para conmigo, todo parece en paz,
en paz por primera vez en años, no me puedo amargar.

miércoles, 21 de octubre de 2009

21-10-09

En algún lugar alguien está pensando profundamente en ti,
Sonríe y tiene muchísimos motivos para hacerlo siempre,
Suspira de manera fuerte y se siente hasta un poco adolescente,
Tendrías que sentir su corazón acelerado y su latido enérgico,
Al principio muchos no entendían porqué se comportaba así,
Nadie ve que sus pies se separan de suelo angelicalmente,
Su cabeza está semi embotada, en otras calles con otras gentes,
Puedes adivinar muchas cosas sobre ella, si la miras en silencio.

Suele decirse para sí que antes de conocerte no vivía, “sobrevivía”,
Con sus planes que iban a Ninguna-Parte y sus sueños de mentira,
Con un futuro tan oscuro y lleno de desconocimiento que aterraba
Y un alma sola que se quebraba y tiritaba sin que nadie le ayudara.
He visto su sonrisa cuando está contigo y te juro
Que no he visto nada tan sincero en éste mundo.

En algún lugar alguien no puede dejar de pensar en ti,
Respira tan fuerte recordándote que está medio agotada,
Se pregunta qué estarás haciendo ahora, si estarás bien,
A pesar de que lo intenta no puede pensar en otra cosa.
Se queda parada, cavilando como una estatua de marfil,
su sonrisa prácticamente felina le cubre toda la cara,
reflexiona, reflexiona muy tranquila y sabe de sobra que
de un tiempo hacia acá se ha convertido en otra persona.

domingo, 13 de septiembre de 2009

Tumbos

Me bloqueé, me quedé petrificada en ésta equis,
fue en el momento en el que decidiste que debía seguir;
Siempre me pregunto qué te pasaría por la mente
para llegar a tal aberración, a tal espectáculo.
Así que decidí crear ésta clase de mundo infértil,
una cúpula de la que nadíe, ni tu dios, podía entrar o salir,
lo hice con la mejor de las intenciones y en mi frente
me taladré mil agujeros para drenar todo ésto.

En ningún momento te he pedido ayuda para tus planes,
no ves bien, sólo logras ver una cara de la moneda de mi rostro,
una moneda que reposa en mi párpado oscuro y cerrado,
con la boca apretada, casi temblando, con miedo a articular sonido alguno,
por el miedo a que te levantes farfullando "¿Qué haces"?,
cuando yo ni estoy. Me aplastaste con tus zapatos de tacón rojo,
asfixiándome con el abrazo poético de tus gestos helados,
llenando ésta tumba mía de sangrientos rompecabezas, humo y más musgo.

Estoy aprendiendo a no hablar nada en tu presencia,
mis palabras no son bien recibidas en éste lado del mundo.
Una vez me liberé, me descosí la boca; Fue hace meses.
Pensé que no volvería a llegar a éste vanidoso y gris punto,
sentía que podía hablar, que podía lenvantar la cabeza,
corté cuidadosamente los hilos que me callaban uno a uno,
había criado polillas que me habían hecho enloquecer,
se fueron, pero quedaron las larvas que aún hoy incubo.

Al principio no podía ni hablar con fluidez, era una ventaja.
Asentía, gesticulaba, sonreía y tu mundo estaba en equilibrio;
Cuando empecé a recordar cosas no fue indoloro o demasiado fácil,
una parte de mí estaba recuperándose, volviendo a casa
¿A casa? Sabía hablar, pero me aterraba emitir algún sonido.
El amor, tal y como lo conocemos hoy, se hacía cada vez más fragil.

Sueles sonar de fondo, como una máquina de respiración asistida,
murmullo que se pasea pisoteando el interior de mi suave tímpano.
Algún día te llamaré o quizás decida no volver a hacerlo de nuevo,
sé que lo estás esperando, lo deseas con todas tus fuerzas,
puedo volver a mentir, a actuar, a fingir ¿Quieres que te lo diga?
Ansías ése "te necesito" como si fuera un regalo de cumpleaños;
Pero no puedo decírtelo, no de ésta manera, sé que así no puedo,
deberían gritarme, deberían torturame de pies a cabeza.

¿Yo también paseo ruidosa por el laberinto mal podado de tu mente?
¡Dios! Estoy lejos y no podría tenerte más cerca,
deberías cortarme el cuello, colgarme boca abajo para sangrar esto;
No puedo despegarme de ti ¡Y no es ninguna muestra de cariño!
Es una prueba, como las marcas en el brazo de un drogodependiente.
Yo quisiera gritar y llorar hasta quedarme seca,
pero no puedo ¡Mira lo que has conseguido durante todo éste tiempo!
Me gustaría mostrarte la clase de monstruo que has construído.

Quizás la línea se cortó mientras hablábamos por pura cortesía;
Palabras correctas, nadie debe saber cómo de podridos estamos.
Pero el cabe que siempre nos ha unido no puede ser arrancado de raíz,
cordón umbilical invisible, sonda gastrointestinal
que logró encamarme y destrozar con gozo mis bonitas rodillas.
Me siento lista para reparar, como si me llevaran al quirófano.
Nunca entendí nada de esto, nuestra casa fue para mí como otro país.
Es sorprendente que ni siquiera me dejes respirar.

Estoy volviendo, estoy volviendo sin ningún entusiasmo,
durante los últimos años he estado sintiéndome muy cansada,
yendo hacia ningún lado que no tenía sentido sin la palabra.
¿Por qué has decidido arrebatar mi precioso y joven tiempo?
Y pasa siempre, una muerte, una resurrección cada año,
que nos duele mientras nos crucificamos con la mirada.
Realmente, realmente ¿Quién olvidó cambiar la cuna por la caja?
Esto me persigue a menudo ¿Qué es lo que nos hemos hecho?

viernes, 28 de agosto de 2009

La mujer de azul

He perseguido por toda la ciudad
a una señora regordeta y peliroja.
Llevaba un vestido caro de tela azul
y unos tacones negros algo pequeños.
Iba caminando a toda velocidad
y yo me convertí en su sombra.
Ni se volvió, ni dijo "¿Quién eres tú?",
estúpida forma de perder el tiempo.

Empecé a imaginar cómo sería su vida
¿Estaría casada? ¿Tendría algún hijo?
¿Huiría de alguien o algo? ¿Era forastera?
Quise robarle el bolso y echar a correr.
Callejeaba y yo detrás sigilosa sonreía.
Y si yo tuviera mis dedos en un gatillo
¿Sería capaz de robarle hasta las muelas?
Si tuviera éxito lo repetiría otra vez.

En mi vida cotidiana nunca pensé que haría esto,
pero le seguí, hasta que volvió la maldita cabeza
¡Ah, sí, me has descubierto y también a mi pistola!
Tus andares patizambos no abogan por tu vida
y no puedes huir a tu ritmo estúpido de cerdo.
Nadie te oye y yo tengo muchas ganas de violencia,
tropiezas tórpemente y caes rodando como una bola.
Bienvenida a mi momento psicópata del día.

Bang-Bang.

viernes, 31 de julio de 2009

El tratante, la sala de reuniones y el postoperatorio

[EL TRATANTE]

Llego...

Miro hacia todos los lados por si tú vienes,
pero parece que te estás tomando tu tiempo.
Hoy el sol es más cegador que nunca,
no logro por verte por ninguna parte.
Entonces, cuando estoy apunto de volverme,
apareces con tu sonrisa y tu traje perfecto;
¿Sonríes de verdad o es una burla?
Miras a un punto fijo sin inmutarte.

Saludas y me tiendes la mano sin nervios;
Creo que tu tacto puede hacerme hasta daño,
lo cuál te hace sonreír mucho más que antes.
Lo sé: Nunca he podido ser demasiado perfecta,
he seguido el protocolo, las reglas del juego,
así que me examinas bien y nos marchamos.
No hay nada salvo tus gestos impacientes;
No debería haberte ofrecido mi alma en venta.

"¿Me va a doler demasiado? Tú ya lo sentiste una vez..."
digo estrujando un papel como si retorciera un cuello;
También abandonaste tu alma como una prostituta,
pero no te hizo falta ponerte es una esquina,
sólo te enfundaste en tu mejor traje, dejándote ver.
El placer inconsciente de no tener escrúpulos fue bello
pero efímero, te hiere y hasta finges que te gusta,
aunque por dentro necesites litros de medicina.

Seguimos caminando ¿Acaso no te fijas hacia dónde vamos?
El mismo centro del infierno decorado con cierta gracia,
una sala de quirófano bien iluminada y sin olor a lejía;
¿Voy a convertirme en alguien como tú? ¿Te compensa esto?
Creí tenerlo aceptado, pero ahora que te veo lo tengo claro;
Saldría corriendo, pero entonces me llamarías egoísta,
un trato es un trato y mi virtud nunca ha sido la sabiduría;
Ya me tienes donde querías: sentada en un agujero negro.

[LA SALA DE REUNIONES]

Llegamos...

Éste cuarto extraño me asusta, no se asemeja a una cárcel,
tu mesa metálica parece robada de un hospital,
no me siento nada cómoda estando en ésta silla medio rota;
No quiero aceptar de ningún modo que me estoy arrepintiendo.
Bebes agua como si corrieras el peligro de deshidratarte,
tu figura es delgadísima bajo ésta luz artificial,
no eres Dios, eres alguien que quiere inducirme un coma
¿Es electroshock lo que hace que mis sienes estén ardiendo?
¡Estoy diciendo demasiado! ¡Lo sé, debo empezar a callarme!
Necesitamos un celador para que deje de hablar.

En tus ojos no logro hallar absolutamente nada,
salvo un remordimiento que me hunde y me consume
¡Ojalá pudieras ver la vida através de éstas cuencas
vacías que algún loco se atrevió a llamar ojos!
Probablemente te asustaría hasta volver a casa,
probablemente los dejarías ahí, sin que se curen
¡Pero eso apenas importa ya! ¡Nada de esto cuenta!
Aquí lo primordial es cuánto obtendrás de mis poros.

Me miro a un espejo con un marco de elefantes de bronce
¿Cambiará mi imagen? No me gusta esa mujer que se refleja,
mírala: me encantaría acabar con ella ¡Tan lánguida, tan débil...!
Creo que no la soporto, creo que por eso estoy aquí ahora mismo,
quiero que su piel recupere su antiguo color de tonos ocres,
añoro la forma que tenía de sonreír, añoro su rostro sin ojeras,
su forma de ser sin miedo al mundo, sin miedo a ser algo feliz.
Lo que era antes, el ser mejor volverá cuando salga de éste sitio.

Así que tras un rato decides mostrarte hasta amable,
incluso me tocas, aunque eso me haga sentir incómoda
¡Me echaría las manos a la cabeza si tuviera algo de valor!
Pero mi pose de estatua es muchísimo más correcta
o al menos eso es lo que me enseñó en su día mi madre,
a ser agradable aunque me saquen la vida por sonda,
a seguir las normas, a pesar de la soledad, a pesar del dolor...
Y mira a lo que he llegado: A poner mi alma en venta.

Pienso todas estas cosas mientras me dices que me tumbe,
creo que desde aquí puedes escuchar los latidos de mi corazón;
Nadie me necesita y nadie de mis conocidos sabe que estoy aquí,
si hay alguna clase de negligencia puedes enterrar mi cadáver,
ninguna persona va a echarme de menos, no te preocupes;
Yo vendo mi alma, otros juegan con drogas o consumen alcohol,
es simplemente otra manera difícilmente fácil de poder existir.
Si fracasas, por favor, no dejes que mi pulso se vuelva estable.

Y parece que tu expresión ha cambiado levemente por un instante
¿Es bondad lo que puede apreciarse en la juventud de tu rostro?
Me alegro ¡Parece que no voy a perder la humanidad al final!
Lavas cuidadosamente el material que vas a emplear para la operación,
en realidad no... Nada parece haber cambiado en tu semblante,
Debe haber sido alguna clase de molestia o exceso de luz del foco
Estoy tan nerviosa que no soy consciente de nada ¡Qué calamidad!
Ya empieza todo, lo noto, noto cómo voy olvidado casi toda sensación...


[EL POST OPERATORIO]

Se ha ido...

La anestesia se va de mí como una mano amiga en un mal momento;
Siento dolor o un recuerdo parecido de lo que solía ser el dolor
¿Cuánto musgo está dispuesto a acoger ésta maldita, maldita lápida?
Suspiro profundamente... Todo lo profundo que puedo aspirar a respirar.
Vienes sonriendo, no sabes hacer otra cosa ¿No? ¿Y ése espejo?
¡Apártate de mí antes de que decida agujererar tu cara como un globo!
Ah ya sé lo que pasa aquí, es tu burbuja llena de vida, de mi vida,
Me echas diciendo que tu casa no es una pensión o una cosa parecida.

Tus escaleras, esas escaleras de un cuadro cubista que me asustaban
ahora simplemente empiezan a no decirme nada, a no existir sin más
¡Vuelta a la sucia vida real, con sus malditos transeuntes de vida inútil!
Quisiera matarlos a todos, quisiera prenderles fuego como si fueran de papel.
¿Qué es esto? Dios ¿Quién se supone que es esa voz que habla y habla?
Soy yo, sin alma ¡Lo he conseguido, lo he conseguido sin echarme a atrás!
He salido viva de esta, he pasado esa delirante prueba en ése horrendo cubil
y la muerte, la muerte se representa como un estúpido chiste que está por hacer.

Llegaré a casa y voy a acabar muy despacio con todos mis conocidos,
ya no les necesito en mi nueva vida, no me aportan nada en éste plano
¿Cómo hacerlo? ¿La llave del gas? ¿Gasolina y unos fórforos? ¿La comida?
Oh, todo sería tan fácil si al morir desaparecieran, pero ¡Malditos cuerpos!
Podría plegar sobre sí a mis niños y podría envenenar a mi joven marido.
Abro la puerta ¿Qué ocurre? ¿Dónde están todos? ¿Qué es lo que ha pasado?


He tardado mucho en volver a casa, sí, me he demorado algunos años
Ahora quieren encerrarme por abandono... ¡Menuda locura es ésta!
Yo sólo quiero tumbarme en el suelo y sentirlo tan hermoso y frío,
ah, es el silencio, el hermoso eco dentro de las paredes de mi vacío pecho...
Estoy más delgada y ojerosa, veo mis costillas, todo ha sido un engaño.
Mi esencia en algún sitio, perdida como en manos de un proxeneta
le da satisfacción a alguien que estaba inundado de su propio hastío.
Hago mi último guiño a la vida y, cuando parece imposible, me desvanezco.